Este relato interactivo está enfocado a personas adultas ya que utiliza un lenguaje propio de este grupo de edad.
En cuanto a la interfaz podemos decir que es uniforme utilizando siempre el mismo tamaño de letra, el mismo color de fondo y la misma estructura de viñetas. Podemos decir que es intuitiva en algunas viñetas ya que sabes en cada momento dónde has de pulsar para continuar la historia, y en otras partes no intuitiva ya que es difícil poder encontrar los elementos para salir y continuar la historia.
El nivel de interactividad que se nos plantea, es un nivel de interactividad 3, ya que los distintos itinerarios para continuar la historia, al pueden llevarte a acabar la historia de una u otra forma.
Por otra parte, en la navegación, podemos encontrar constantemente multitud de itinerarios, que en muchas ocasiones dificultan la lectura continua de la historia.
El relato tiene un nivel bajo de inmersión ya que no ha hecho que me sumerja en la historia, a causa de la escasa de interactividad. La única opción era ir eligiendo caminos donde no existía ni la creatividad, ni la libre opcionalidad por parte del autor para continuar la historia.
En la accesibilidad encontramos algunas viñetas atajos del teclado ante la imposibilidad de utilizar el ratón, pero no aparece audio ante la posibilidad de que el interlocutor sea ciego. Existe un test en internet llamado TAW que analiza el nivel de accesibilidad e imposibilidad del relato.
El último elemento comunicativo a analizar es la usabilidad, donde podemos encontrar un texto con una larga curva de aprendizaje, ya que es un relato difícil de leer y entender con gran cantidad de viñetas que no sabes a que viñeta anterior te ha llevado, y te pierdes tratando de encontrar la salida válida y el final de la historia.